La tragedia de la buena suerte.

En esta publicación abordaremos la tragedia de la buena suerte.
Este artículo es sencillo, pero este tema llamó mi atención y decidí contarles un poco al respecto.

Un hombre estaba paseando a su perro por el parque, el perro salió corriendo y el hombre sin fuerza previa, suelta la correa, debido al impacto por el jaloneo del perro al perseguir a un conejo que salió de un arbusto. El hombre ve cómo su perro se alejo más y más mientras él lo persigue.

Después de un tiempo el hombre no ve a su perro, tampoco el perro ve a su dueño.. El hombre desesperado y triste empezó a buscarlo junto con sus amigos y vecinos, pero, el tiempo pasó, y después de una semana, el perro seguía perdido.

EL hombre estaba devastado, solo pensaba en lo terrible en que el conejo saltó justo en el momento incorrecto y que su mano no tenía la suficiente fuerza para no soltar la correa porque estaba distraído.

Una semana después se acercó una mujer con el perro del hombre. Después de que el perro y su dueño tuvieron un encuentro cariñoso, el hombre se presentó con la mujer. La mujer es hermosa y tiene la misma edad que el hombre. Los dos charlaron un poco y se atrajeron mutuamente. Las semanas pasaron y ellos comenzaron a salir juntos varias veces. Todo salió tan bien que poco a poco se empezaron a gustar.

El hombre solo pensaba en lo “suertudo” que fue, que la mujer estuvo en el lugar correcto, en el tiempo correcto de encontrar y regresar a su perro; que si no hubiese sido por el conejo que saltó a alborotar a su perro que hizo que desapareciera, la mujer nunca hubiera encontrado al perro perdido y nunca se hubieran conocido.

Ahora bien, la tragedia de la buena suerte es cuando pasa algo sin beneficio y/o trágico que causa tristeza o dolor, pero que sin ello, no hubieran ocurrido situaciones benéficas.

Otro ejemplo para dejar esto más claro: El mismo hombre va manejando de camino a recoger a su novia;pasando la luz verde del semáforo, de lado izquierdo un automovilista no se detiene y choca al hombre, de impacto, el coche empieza a dar vueltas.

El hombre, inconsciente, despierta en el hospital con la noticia de que sufrió un golpe severo en la cabeza y que se tiene que realizar unos análisis y un scan cerebral para determinar el grado de severidad y checar la posibilidad de que tenga un derrame cerebral o sangrado.

El hombre reflexiona en la mala suerte que tuvo de que justo en ese momento, el otro hombre no pensó, y cruzó al mismo tiempo que él, en la misma dirección, al mismo tiempo. Se enfurece de pensar en la posibilidad de que su vida sea arruinada por esta circunstancia random.

Llegan los resultados de los análisis y el doctor le da el diagnóstico, tienen una una buena y mala noticia. El hombre decide escuchar primero la mala noticia.
La mala noticia es e el tumor en el cerebro, la buena noticia es que si no hubiera chocado, jamás hubieran encontrado el tumor. El choque fue un golpe leve, pero sin él, no hubieran hecho los análisis. El choque le salvó la vida.

¿Te has puesto a pensar en la tragedia de la buena suerte? Cuando una puerta se cierra otras se abren y las experiencias que vives te benefician en muchos sentidos, el chiste es sacarle lo bueno de lo no tan bueno.